Cerro Mirador del Manantiales
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Estando parados en la cumbre del Sesquicentenario observamos el paisaje y los cerros vecinos. Teníamos a nuestro alcance diversas cumbres, el Manantiales, Mirador del Manantiales, Duende, Alto Retamales etc, sin tener claro para donde ir, comenzamos a bajar del "Sesqui" en dirección al portezuelo que se forma entre las cumbres del Mirador y el Duende.
Bajamos por el lado este de la cumbre del "Sesqui", por un canaloncito de tierra y piedras sueltas. Sin duda la bajada lógica no es por ahí, pero una vez abajo nos pasamos a un planchón de nieve vieja bastante dura. Con zapatillas costó un poco pasarlo sin resbalarse pero logramos volver al acarreo y tomar el sendero que se dirige al portezuelo.
Foto: ¿Pallá?, noooo, mejor pallá... |
Aún no decidíamos nada, solo avanzábamos hacia el portezuelo. En el camino cruzamos un par de planchones de nieve, sacamos algunas fotos y paramos a comer algo e hidratarnos un poco, el sendero se perdía pero el camino se mostraba obvio entre acarreos y piedras sueltas. Tranquilamente continuamos nuestro ascenso, era temprano, la vista soberbia hacia las grandes montañas de la Zona de Pangal, Cajón de Flores y Río Blanco. Jaime y Roberto se adelantaron al grupo, cuando llegaron enfilaron en dirección al Mirador del Manantiales, así que el resto del equipo solo tuvo que seguir sus pasos. |
Tomamos el Filo SO, rocoso, pero suficientemente amplio para avanzar tranquilamente. Desde abajo se veía más largo, pero nos demoramos poco en llegar a la cumbre, eran las 09:30 y conseguíamos la segunda del día, 1:40 después de pasar por el Sesquicentenario.
En poco rato se juntó el grupo completo en la cumbre, había una especie de mástil de madera entre las rocas amarrado con alambres.
Entre las piedras nos acomodamos y nos felicitamos, no es común hacer más de una cumbre en una misma salida, cumbres independientes claro, no puntas de un filo, así que estábamos muy felices y conformes.
Bastante rato estuvimos en la cumbre, era temprano y aún teníamos tiempo para un tercer cerro, solo teníamos que decidir cual...
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Autor: Elvis Acevedo.
"El alpinista es quién conduce su cuerpo allá dónde un día sus ojos lo soñaron..."
Gaston Rébuffat.